Psicólogos para resolución de conflictos laborales

Psicólogos expertos en conflictos laborales

El conflicto laboral se define como el altercado entre dos o más empleados en las relaciones laborales.

No cabe duda de que en cualquier grupo puede surgir algún conflicto, pero esto no significa que no haya solución.

Los motivos más comunes por los que ocurren los conflictos laborales son:

  • Diferencias encontradas en las conductas de miembros del equipo
  • La desmotivación
  • Bajo desarrollo de competencia de adaptabilidad al entorno
  • Mala comunicación
  • Diferencias de criterios en temas culturales, políticos o religiosos
  • Falta de integración de algunos de los miembros del equipo
  • Bullying
  • Acoso
 

Centro de referencia en resolución de conflictos laborales en Madrid

Hay diferentes formas de resolver los conflictos y van en función de la asertividad (conseguir objetivos propios) y la cooperación (ayudar al otro en sus metas).

Los conflictos laborales son eventos que debemos enfrentar. Ante la presencia de cualquier conflicto laboral es preciso seguir las siguientes recomendaciones:

Tratar de darse cuenta de los conflictos lo antes posible:

Si crees que existe algún problema en tu equipo de trabajo, haz frente a la realidad y no esperes a que se resuelva por sí sólo. Un conflicto no resuelto podría convertirse en algo peor, por eso puedes acudir a Armonía Psicólogos para obtener las herramientas necesarias y así poder parar cualquier situación antes de que se descontrole.

Reunirse para tratar el tema:

Haz una reunión con los discrepantes al mismo tiempo. Permite que todos expliquen sus posturas sin que sean interrumpidos, esto permitirá que los implicados tengan la oportunidad de compartir sus posturas de forma tranquila y considerada. Refuerza el hecho de que el problema sólo puede ser resuelto por medio del diálogo y la negociación y antes de que nadie diga nada, hazles entender y acordar que el único fin de la reunión es resolver el conflicto.

Sé firme:

No seas excesivamente comprensivo en cuanto al problema. También evita tomar un tono agresivo. Escucha con empatía y objetividad. Deja claro que no te pondrás de ninguna de las partes y sé objetivo con el fin de solucionar el conflicto para la mejora de la situación laboral.

Consigan llegar a un acuerdo sobre el problema de manera conjunta:

Crea consenso sobre tu evaluación del problema antes de buscar una solución. Encuentra un terreno común entre los antagonistas. En este punto, tu clarificación podría solucionar el problema. Si no es así, es crucial que lleguen a un acuerdo sobre la percepción común del problema.

Explorar soluciones alternativas:

Si una parte siente que ha ganado, la otra podría seguir descontenta, por lo que debes concentrar tus esfuerzos en crear una solución positiva para ambas. Insiste en que ambas partes formen parte de la creación de la solución y asegúrate de que cada parte sugiera lo que personalmente haría para resolver el problema.

Acordar una solución:

Una vez discutidas las posibles soluciones, decide la solución que mejor hace frente a las necesidades de ambas partes y de su organización. Ponlo por escrito, con acciones acordadas claramente explicadas. Decide cómo medirá el éxito de forma colectiva. Supervisa el progreso habitualmente y refuerza el éxito de forma positiva con elogios verbales.