La psicología tiene sus bases teóricas en diferentes modelos. Estos modelos son empleados para explicar el comportamiento o conducta del ser humano desde diferentes perspectivas para conocer las características de las personas en el ámbito psicológico, realizar diagnóstico y realizar terapias a través de profesionales.
A continuación exponemos las más utilizadas en Armonía Psicólogos:
La terapia cognitiva conductual, como su nombre indica, emplea técnicas tanto cognitivas como conductuales. La teoría conductual basa sus procesos de conducta en estímulos- respuestas, viendo al ser humano como un ser automático. Por su parte, la teoría cognitiva, se caracteriza por un profundo énfasis en los procesos internos, convirtiendo al ser humano en una entidad mucho más dinámica.
El principal representante la teoría cognitivo-conductual es Aaron Beck, que con su trabajo sobre la depresión marca el inicio de esta teoría. Su supuesto teórico de esta teoría es que la persona estructura el mundo en base a su percepción, la cual se ve influenciada por una serie de creencias y esquemas que han sido incorporados en un proceso de aprendizaje previo. En base a esta información previa, la persona interpreta los hechos, situaciones o eventos que le ocurren. Es decir, es un modelo que defiende que no son las situaciones lo que provocan las emociones y conductas sino lo que se piensa de dichas situaciones. Así, lo que sucede entre la situación, pensamientos y consecuencias se conceptualiza en el modelo “ABC” el cual es empleado para esquematizar de manera práctica la relación entre dichos elementos.
Estas técnicas terapéuticas tienen los siguientes fines: identificar pensamientos o conductas problemáticas, modificarlas para reducir síntomas y, finalmente, hacer una reestructuración de creencias que le permita a la persona percibir de manera más realista las situaciones. Sus aplicaciones abarcan depresión, trastornos de ansiedad, TOC, adicciones, fobias y trastornos alimenticios entre otros.
EMDR son las siglas en ingles de una novedosa y potente técnica psicológica que significa “Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares”. Fue desarrollada en sus inicios por la doctora Francine Shapiro en EEUU a finales de los años 80. Las personas que sufren cualquier tipo de los llamados trastornos mentales o simplemente dificultades en su vida, es decir, miedos, fobias, depresión, duelos, etc. se pueden beneficiar de esta técnica independientemente de su edad.
Estudios neurocientificos demuestran que la estimulación bilateral activa (con tacto, sonidos, movimientos oculares, etc.) zonas cerebrales como la amígdala, el hipocampo y las zonas prefrontales de la corteza cerebral. Estas zonas están relacionadas con la memoria y el aprendizaje, las emociones y el procesamiento de la información y sirven como herramienta para acceder a los mismos. El EMDR está avalado como un procedimiento basado en la evidencia científica según importantes organizaciones como la Organización Mundial de la Salud.
Una forma fácil de entender cómo funciona esta técnica es imaginando el cerebro humanos como un gran ordenador. Desde que nacemos, nuestro cerebro procesa y almacena información minuto a minuto y todo queda grabado en nuestra memoria seamos conscientes o no. Imaginemos que estamos en la playa y, de repente, nos revuelca una ola que nos podría haber ahogado. Nuestro cerebro almacena información de “agua=peligro”, esta información queda archivada en nuestro ordenador mental de modo que nuestro cerebro leerá el archivo “peligro” cada vez que nos acerquemos al mar o una piscina de una forma automática e involuntaria. Con el paso de los años, nos habremos olvidado de aquel incidente, pero nuestro cerebro seguirá reaccionando con una respuesta fóbica ante el mar y las piscinas, incluso ante el agua misma. Puede ser que un día decidamos luchar con nuestro miedo y acudir a un terapeuta que decida aplicar EMDR con nosotros y permita que nuestro cerebro, de forma natural, procese y ajuste aquellas memorias y aprendizajes perturbadores para que podamos acercarnos al agua y disfrutar. Con EMDR, la sabiduría natural de nuestra mente sustituirá aquella sensación de peligro cuando la ola nos revolcó por otra información más ajustada y liberadora.
La psicología humanista nace con la pretensión de configurarse como una alternativa a la visión del ser. Esta teoría se gesta durante las décadas 50 y 60 del siglo XX y se relaciona con las concepciones filosóficas que colocan al ser humano como el centro de su interés. El humanismo también puede ser entendido como una determinada concepción del ser humano y también como un método. Los principales representantes de esta escuela son William James, Gordon Allport, Abraham Maslow, Carl Rogers y Víctor Frankl entre otros.
Sus postulados básicos sobre el hombre nos dicen que es más que la suma de todas sus partes: Lleva a cabo su existencia en un contexto humano ya que es consciente, tiene capacidad de elección y es intencional en sus propósitos, tiene creatividad, comprensión de significados y experiencia valorativas.
Carl Rogers es uno de los autores más conocidos del movimiento humanista. Su método terapéutico es la terapia sentada en el cliente y nos dice que debemos tener dos rasgos para esta: un clima agradable y la confianza en la persona. Para Rogers, el ser humano nace con la tendencia realizadora que, si en la infancia no se estropea, puede dar como resultado una persona plena y abierta a nuevas experiencias. También enuncia tres cualidades en el terapeuta: la empatía, autenticidad y la congruencia en el mismo. Rogers descubre que, cuando el paciente se siente comprendido y aceptado por el terapeuta, se produce una relajación de los sentimientos que le hace sentirse libre y cambiante. Al terminar la misma, el paciente se siente libre y guiado por sus vivencias.
Las teorías o corrientes que repasamos a continuación, o bien se encuentran actualmente en desuso, o han servido como base para desarrollar otras:
Surgió en Europa en el primer tercio del siglo XX como una reacción frente al elementalismo y atomismo del estructuralismo, centrándose particularmente en el ámbito de la percepción. Los principales representaciones de corriente fueron: Wertheimer, Köhler y Koffka.
El término Gestalt se traduce literalmente como “forma” y define el enfoque adoptado por esta escuela que se centró en el problema de la organización perceptual, desarrollando ingeniosos experimentos y demostraciones originales de numerosos fenómenos perceptuales. El principio básico de la organización perceptual es que el todo es más que la suma de las partes, es decir, que las propiedades de la totalidad no resultan de los elementos constituyentes, sino que parte de las relaciones espacio temporales del todo. En esta imagen se muestra como, a pesar de que los elementos del estímulo difieren en los tres casos, en todos ellos emerge el precepto de caricatura de rostro:
El axioma pretende explicar que la organización básica de cuanto percibimos está en relación con una figura en la que nos concentramos, que a su vez es parte de un fondo más amplio, donde hay otras formas. En otras palabras, todo lo percibido es mucho más que información llegada a los sentidos.
En los siglos XVII y XVIII la psicología pertenecía a la psicología, no es hasta finales del siglo XIX cuando la psicología deja de ser fundamento filosófico y pretende ser ciencia. Por un lado se manifestaba la necesidad de ampliar el estudio de la naturaleza humana más allá del cuerpo, a su aspecto mental y conductual y por el otro la fuerte impronta del positivismo del siglo.
El fisiólogo alemán Wilhelm Wundt es un precursor de la actual psicología científica que en 1879 fundó el primer laboratorio psicología experimental en la ciudad alemana de Leipzig y formó a estudiantes de todo el mundo en la nueva ciencia. La tarea del psicólogo era estudiar las experiencias conscientes elementales, o sea, tratar de analizarlas separadamente, de ahí que se denominara esta corriente estructuralismo.
Esta escuela reconoció que la mente y el cuerpo eran independientes entre sí y sin interacción mutua, pero que sus procesos funcionaban de forma paralela. Los aportes más importantes del sistema han sido:
El funcionalismo se interesaba por las actividades o procesos psíquicos como operaciones y no como contenidos. William James, el primer psicólogo nacido en Estados Unidos, en su juventud había estudiado química, fisiología, anatomía, biología y medicina. Posteriormente aceptó enseñar fisiología y aquí empezó a leer filosofía en sus ratos libres encontrando un nexo entre ella y la fisiología, ambas disciplinas parecían converger en la psicología. Creó un laboratorio de psicología en Harvard e inició la escuela de psicología funcionalista que subraya el estudio de la mente como una parte funcional, esencialmente útil del organismo humano. La actitud funcionalista fue consecuencia lógica de la propagación del darwinismo y su doctrina de la “supervivencia de los más aptos”. El funcionalismo psicológico insistía en la importancia de pruebas como los test de inteligencia o experiencias controladas para medir la capacidad de los animales para aprender y resolver problemas. Sus características principales fueron:
Al preparar sus clases y sus libros, James, estudió los escritos estructuralistas a fondo y consideró que había un error en el enfoque de Wundt. Llegaría a la conclusión de que los átomos de la experiencia simplemente no existían. Nuestra mente hace sin parar asociaciones, revisa experiencias, comienza, se detiene, pasa de una cosa a otra en el tiempo. James opinaba que la conciencia es un fluir continuo. Las percepciones y asociaciones, las sensaciones y emociones no pueden detenerse. Cuando observamos un plátano vemos un plátano y no un objeto largo y amarillo.
El psicoanálisis es una disciplina que estudia el alma humana, su desarrollo, estructura información. Su principal representante es Sigmund Freud, quien se interesó por estudiar una patología muy frecuente en su tiempo: la histeria. Para tratar la histeria comenzó a utilizar el método de la hipnosis. Sostiene que si nosotros tenemos neuras es porque hemos tenido un trauma, sobre todo en la niñez, que ha dejado una huella que produce que tú tengas este problema en la actualidad. Por ejemplo ser muy tímido o ser una persona con mucha ansiedad o mucha tendencia al estrés. El psicoanálisis nos proporciona la posibilidad de analizar de manera profunda lo que nos hace ser quiénes somos, asumir nuestros deseos y buscar formas de ser congruentes con nosotros mismos. Actualmente está en desuso y en las escuelas de psicología no se suele explicar ya que se entiende que es una escuela poco científica o que sus presupuestos han sido superados.
Freud plantea la existencia del inconsciente, que es el conjunto de los contenidos no presentes en el campo actual de la conciencia. Para explicar el comportamiento psíquico humano planteó: el Ello, el yo y el superyó.
El psicoanálisis se emplea el término de pulsión (impulsos que tienden a la consecución de un fin) para el estudio del comportamiento humano. Se denomina pulsión a las fuerzas derivadas de las tensiones somáticas en el ser humano, y las necesidades del ello.
El psicoanálisis ha evolucionado enormemente desde su época. Han surgido muchísimas aportaciones, una de ellas es la que habla de psicoanálisis relacional que se refiere a que la mente se construye a través de la relación con el otro.