La asertividad es un concepto del que se habla mucho últimamente, es una manera de comunicarse que consiste en manifestar lo que sentimos, expresar las opiniones de forma honesta y defendiendo los derechos, respetándose a uno mismo y a los demás en la manera de decirlo, sin sentir culpabilidad al dar una respuesta negativa o rechazar una demanda.
Hay personas a las que les cuesta mucho decir que no y tienen que trabajar sobre ello y otras a las que le resulta muy sencillo, esto viene dado por factores biológicos pero también por factores sociales y modales aprendidos, por lo tanto es algo sobre lo que se puede trabajar y que además conviene mucho hacerlo. En ocasiones nos podemos sentir mal al tener que decir que no, pero también por respeto a uno mismo, es necesario. Y decir que no, no siempre es malo, pero debemos saber cómo transmitir una respuesta negativa para no asumir más de lo que podemos y hacerlo de una manera asertiva para no generar sensaciones negativas a la otra parte.
Permitir todo y decir siempre que si no es bueno para uno mismo ni tampoco para la persona que lo pide.
Pues en esto también influye mucho la autoestima, el tener una imagen adecuada sobre ti mismo es fundamental, ya que la autoestima es lo que nos permite creer que haciéndote respetar vas a conseguir tener relaciones buenas y sanas con los demás. Las personas con baja autoestima, creen que siendo sumisos, que es lo contrario a la asertividad, van a conseguir estas relaciones y sin embargo esto genera lo opuesto, que no se valore de la misma manera a la persona sumisa que siempre acepta lo que sea y está a la disposición de todos.
Aquí también tienen mucho que ver la gestión de las expectativas, a veces por pensar que se espera mucho de uno, intentas decir que si y aceptar nuevos retos y pensamos que de otra manera no nos valorarán igual y es un error. Nunca debe perder uno mismo para que gane otro. La balanza debe de estar equilibrada, las dos partes pueden ganar.
Lo primero que debemos hacer para romper el hábito de decir siempre que si y aceptar es intentar romperlo. Darse permiso para decir que no y no sentirse obligado o culpable. Hacer una valoración de cómo es la relación con algunas personas que puede convertirse en tóxica.
Aprender técnicas de comunicación asertiva, es fundamental para conseguir tus metas u objetivos y para sentirte bien contigo y con los demás.
A continuación desde Armonía algunas técnicas para ayudarte a desarrollar o a mejorar tu comunicación. Son hábitos con los que, poco a poco, notaremos que nuestras interacciones fluyen mucho mejor que antes:
¿Para que nos servirá ser asertivo?
No solucionará todos tus problemas pero te sentirás más confiado y te comunicarás más efectivamente cuando lo necesites. Te será útil para varias cosas:
-Para resolver problemas del día a día sin que aparezcan emociones negativas
-Para compartir sentimientos que favorezcan a que los demás compartan los suyos contigo
-Para expresar tus emociones tanto negativas como positivas, en las negativas, los demás no se sentirán molestos contigo, y en las positivas, sin parecer demasiado volátil emocionalmente
-Para tener una conversación de una forma cómoda sin la sensación de estar ninguneando o faltando al respeto a los demás
No puedes cambiar tus emociones pero sí la forma de interpretarlas.
Recuerda que en Armonía siempre estamos a tu disposición para contribuir a tu crecimiento personal.